SONRISA DE CORAZON
"Sorriso es un lugar muy acogedor. Crecí aquí, formé mi familia y elegí vivir. Estoy agradecido con Dios y mi familia, que siempre han sido mi base en todo momento".
A sus 28 años, Jessica ha sabido acompañar el crecimiento exponencial de la ciudad, que siempre ha tenido características de progreso.
Terminó el bachillerato a los 17 años, y al poco tiempo ingresó a la universidad en Sinop, pues en ese momento aún no había psicología en la unidad que eligió.
A pesar de un viaje agotador después de trabajar todo el día y de ir enseguida a Sinop a estudiar, la fuerza y la determinación la hicieron quedarse y luchar por alcanzar sus sueños.
Cinco años abdicando del ocio, los fines de semana y los amigos, donando sólo a los estudios hasta la graduación.
“Fue un momento muy emotivo. Cuando miré hacia atrás, pude ver cuánto valió la pena. ”
Con todos estos logros también llegó otra etapa importante en su vida, su matrimonio con Thomas Felipe en 2017. Otro sueño que ella y su esposo siempre tuvieron fue formar una familia, pero para sorpresa de la pareja en enero de 2020 descubrieron que su esposo Thomas era infértil con solo un 2% de posibilidades de convertirse en padre. El médico recomendó la cirugía, pero no estaba seguro de si realmente resolvería la situación.
Jessica y Thomas son cristianos y con mucha fe creyeron que Dios les daría un hijo sin que Thomas tuviera que operarse. Y en mayo de 2021, su hijo José Carlos vino al mundo sano y recibió con mucho amor de sus padres, un verdadero milagro.
Jéssica Fernanda Moura de Souza se graduó de la Universidad de Cuiabá-UNIC, especializándose en evaluación psicológica y actualmente cursa su segundo posgrado en terapia cognitivo conductual, actuando en varias áreas del comportamiento humano, tratamiento y prevención de enfermedades mentales de adolescentes y niños. .
Considerada una excelente profesional, es también una de las más solicitadas para atender a los niños, tanto es así que en su despacho tiene un rincón todo previsto en formato lúdico, dedicado a que los más pequeños se sientan más cómodos.
Al preguntar qué la motiva en el día a día, se inspira en una frase de uno de los más grandes estudiosos de la psicología.
“Ser empático es ver el mundo a través de los ojos de otra persona y no ver nuestro mundo reflejado en sus ojos” (Carl Rogers)
Ella cree que no tiene sentido no tener un corazón abierto para conocer y comprender a las personas.
Llena de planes, la psicóloga se propone buscar siempre más conocimiento.
